Interacciones Hilo Andante #1 (22/10/2020)
Del edificio Excélsior a la estación Bello Monte
Este recorrido inicia frente al edificio Excélsior en #ColinasdeBelloMonte.
El edificio Excelsior (1955, Arq. Ramiro Cárdenas) es una de las joyas arquitectónicas de esta urbanización, ubicado en la avenida Caroní de Colinas de Bello Monte. Una senda llena de espectaculares caobas y mucha actividad comercial.
Una calle maravillosa, pero llena de obstáculos para lxs viandantes.
Semanas atrás @fospuca realizó una poda de equilibrio de estos árboles. Hacía tiempo que no veía una poda respetuosa. En algunos casos difíciles la poda fue severa y hubo uno que otro desgarramiento (que siempre se pueden evitar).
Son muchos los baches en estas aceras donde cotidianamente caminan muchas personas mayores y con discapacidad.
¿Es necesario eliminar árboles o acaso mejor conservarlos y ampliar en esos puntos críticos las aceras? Ampliar las aceras quitando parte de la calzada obligaría, además, a que los vehículos reduzcan la velocidad.
Acá la muestra clara de que se puede conservar el árbol ampliando la acera: en este punto siempre estacionan vehículos (como el caso de la unidad de la Alcaldía de Baruta).
Lo que viene de la parte alta de Colinas (zona monofuncional, básicamente residencial) “desemboca” en la parte baja: muchos vehículos particulares.
El modelo de ciudad compacta, de usos mixtos, con sabor de calle, aquí está asediado por el exceso de automóviles.
Por cierto, en estas calles han aparecido muchos nuevos comercios (sobre todo bodegas, bodegones, charcuterías) en medio de la crisis generalizada. Fenómeno que no se percibe en zonas similares. Un buen síntoma, por una parte. Pero también un fenómeno requiere reflexión.
¿Esta explosión comercial de la parte baja de Colinas de Bello Monte augura alguna corriente gentrificadora que se mueve desde muy abajo? Al menos las intenciones de cambiar ordenanzas para el eje Chuao-Las Mercedes-Colinas de BM han sido elocuentes.
Este par de apamates, al final de la calle Cervantes, son una reivindicación vecinal de cuando realizaban las obras de ordenamiento y adecuación de aceras de la avenida Miguel Ángel, en el año 2015-2016.
El cuento es que por malas prácticas se cayó una caoba y tuvieron que talar un jabillo durante la construcción de esta plaza (Oberon). Ahora el sol reverbera a esta hora en uno de sus costados, porque allí no se repusieron los árboles caídos.
Cayeron tres y logramos que se sembraran cuatro.
Al margen de las críticas que haré más adelante, esta plaza adquirió mucha vida con esta ampliación. Los chorritos de agua fueron apagados. Entre otras cosas, la escala de la plaza no daba, a menos que eventualmente se cerrara una de las dos vías entre las que se encuentra acuñada (la Cervantes, o la Miguel Ángel), como forma de extender la plaza.
En la avenida Miguel Ángel hay una colección de edificios emblemáticos: Flavia, Ribot, Oberon, Mendi Éder, La Paz, Licterio, que coexisten con una generosa dotación de árboles (básicamente caobas y pilones, aunque también hay ficus), muchos de ellos amenazados.
A pesar de fallas técnicas (rampas desalineadas y con desnivel respecto a la calzada, bolardos atravesados) lo producido era ganancia. Pero de pronto se frenó la obra. Apenas lograron concretar 1/3 del proyecto, aproximadamente. Y desde 2016 no se retoma, ni parece haber intenciones de hacerlo.
Sobre el proyecto de adecuación de aceras en la Miguel Ángel.
Las aceras quedaron maltrechas, algunas picoteadas.
¿Alguna razón para que en todos estos años se haya mantenido este status de abandono y afrentas al transeúnte? Una pregunta pertinente que debe responder la Alcaldía de Baruta. @VecinodeBaruta @AlcaldiaBaruta
Esta esquina (horrenda, peatonalmente hablando), estuvo peor hasta hace apenas un par de meses. Pasó largos años (al menos 14, el tiempo que tengo viviendo en la zona), con la tapa oxidada, hundida y rota.
He visto una y otra vez cambiar asfalto en esta avenida. Obvio que hay que mantener las vías por las que no solo circulan vehículos particulares, también bicicletas y transporte público… ¿pero las aceras para cuándo?
Los vehículos (los conductores) sobre la acera, obstaculizando siempre el paso peatonal. Al fondo la estación de gasolina (esta es subsidiada), en las que volverán a hacerse pronto infinitas colas. Los carros mandan en Caracas.
¿Si no mandan los vehículos en estas calles, por qué la acera no existe en este y otros puntos de Caracas?… la respuesta en este caso –como en tantos otros– es porque la acera y el retiro son requeridos por el comercio (en este caso una cauchera) para estacionar vehículos.
La visión haimaneltroudista de la ciudad: una hecha a imagen y semejanza de las caravanas ministeriales de camionetas y escoltas motorizados.
La ribera sur del Guaire, gran oportunidad para replantear la relación con el río a través de proyectos de espacio público pensados para la movilidad y la recreación. Por ahí estamos desde Ciudad Laboratorio comenzando a trabajar en algo bonito con @enlace_arq para escuchar los rumores del río.
Caminar las aceras de la avenida Principal de Colinas de Bello Monte, y cruzarla para caminar al lado del río o para tomar el transporte público, es un desafío enorme para la gente que se mueve a pie, que es la enorme mayoría en esta ciudad.
Las aceras de la avenida Principal de Colinas de Bello Monte, en el municipio Baruta, son un catálogo infinito de obstáculos y amenazas para los peatones. Una auténtica vergüenza.
Cerramos aquí esta primera edición (un poco extensa) del #HiloAndante, frente a la también cerrada estación de Metro de Bello Monte, de la Línea 5, una promesa incumplida -desde hace muchos años- de mayor conectividad urbana para caraqueños que se mueven a pie.